LEMA

"En cada encuentro, en cada texto, nos vamos palabreando sin prisa, con verdad y con voz propia."
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Puerto Sotogrande convoca las bases de su IV Certamen de relatos y VII certamen de poesía

El mar vuelve a ser inspiración: poesía y relato toman el timón

El Puerto de Sotogrande, en colaboración con el Taller de Escritura Palabreando, la Asociación Hércules Cultural y la Torre de Control del Puerto, anuncia la apertura del VII Certamen de Poesía y el IV Certamen de Relatos Puerto Sotogrande, dos convocatorias ya imprescindibles para quienes encuentran en el mar un escenario poético y narrativo.

Ambos certámenes están dirigidos a personas mayores de edad, nacidas o residentes en España, que presenten obras inéditas y escritas en castellano.
El mar y el puerto serán los protagonistas obligados de las obras, sin espacio para textos que incluyan connotaciones negativas, discriminatorias o violentas.

Dos rutas, un mismo horizonte literario

IV Certamen de Relatos Puerto Sotogrande

Relatos inéditos de entre 150 y 1000 palabras.

VII Certamen de Poesía Puerto Sotogrande

Poema único o conjunto de poemas que no superen los 60 versos.

  • Cada participante podrá presentar una sola obra por certamen.

Premios con sabor a mar

Entre los galardones se encuentran noches en la exclusiva casa flotante Little Paris, paseos en velero por las instalaciones de Puerto Sotogrande, cenas en restaurantes emblemáticos y encuentros con la poesía en plena mar.

Calendario

  • Apertura de recepción: 1 de abril de 2025
  • Cierre de recepción de relatos: 31 de agosto de 2025
  • Cierre de recepción de poemas: 31 de agosto de 2025
  • Fallo y entrega de premios: durante el VIII Encuentro Poético-Musical en el Puerto de Sotogrande. La fecha se comunicará una vez fallados los premios.

Cómo participar

Las bases completas y en pdf, de ambos certámenes, pueden solicitarse escribiendo a:
📩 tallerescrituranrf@gmail.com

Puerto Sotogrande, una vez más, invita a dejarse llevar por la corriente literaria, a bordear los muelles de las palabras y a fundir la poesía y la narrativa con la sal del Mediterráneo.








LEE LOS POEMAS Y LOS RELATOS PREMIADOS DEL VI Y III CONCURSO PUERTO SOTOGRANDE

El pasado 11 de octubre, la Torre de Control del Puerto Sotogrande fue el escenario de la entrega de premios del VI Concurso de Poesía y III de Relatos, en un acto que congregó a un nutrido grupo de escritores, jurado y asistentes.

El evento, está organizado por Palabreando, taller de escritura en colaboración con Puerto Sotogrande,

El jurado, ha estado compuesto por figuras literarias de renombre, entre ellos Juan Emilio Ríos, Eduardo Sáenz de VaronaCarmen Sánchez Melgar, Mª Ángeles Chozas y Natalia Angulo y Nuria Ruiz Fdez. como presidenta del mismo,  evaluó un gran número de obras, subrayando la calidad y diversidad de las mismas. 

La noticia completa con fotos y vídeos del evento en: https://culturaenabierto.com/2024/10/13/creatividad-literaria-con-la-entrega-de-premios-del-vi-concurso-de-poesia-y-iii-de-relatos-de-puerto-sotogrande/


En poesía, el primer premio fue para Mª Mercedes Sánchez Pérez, de San Roque.

BIOGRAFÍA: Sanroqueña, nacida en los sesentas, vivió su infancia  y adolescencia en este querido pueblo, y sus calles y Alameda la vieron crecer en el seno de una familia muy vinculada a la Ermita de San Roque.

Al terminar COU, ya en la Democracia,  se diplomó como programadora y Analista de Sistemas Informático, estudios pioneros  que le dio la oportunidad de trabajar como programadora durante más de una década, informatizando empresas del campo de Gibraltar y costa del Sol.

En la década de los 90 hasta el 2000 se dedicó profesionalmente  al negocio familiar de venta y mantenimiento de equipo informáticos y reprografía , y ya en el 2001 ejerció como monitora de Informática  de la Universidad Popular, durante más de 9 años. Una experiencia que le inspiró inquietudes sociales, amor por la docencia y una gran cantidad de amigos y un enamoramiento sin igual por el proyecto de las Universidades Populares,  con su aprendizaje a lo largo de toda la vida,  ocio de calidad y el arte como expresión y terapia.

Todo ello le llevó a graduarse por la UNED como Educadora Social y además le dio una magnífica oportunidad de vivir una experiencia política como teniente de alcalde de las delegaciones de Empleo, Bienestar Social e Igualdad, Educación y Universidad Popular, siendo Alcalde D. Juan Carlos Ruiz Boix, PSOE a quien agradece esta oportunidad. Una vivencia muy enriquecedora, a la vez que dura y dolorosa, con mucho trabajo y poco presupuesto, en la legislatura 2011-2015 en los que la crisis económica afectó profundamente a muchas familias a las que había que ayudar, pero  y a pesar de todo, se hizo una buena gestión.

En cuanto a momentos memorables de su vida profesional y social señala el momentos de jurar el cargo como concejal de su querido pueblo San Roque. Recuerda también siempre con mucho cariño su actuación con el grupo municipal Albarracín en el festival de los Pueblos del Mundo, bailando el fandango de San Roque, la joya de nuestro folklore,  representando a Andalucía junto a otras nacionalidades (Paraguay , Rusia… etc) en el teatro Romano de Mérida un enclave sin igual,  de la mano de la querida Chari Espresati. Destacar otro momento muy emotivo como lo fue la oportunidad de ser la pregonera de la Semana Santa  2005 por la vinculación familiar a las cofradías y la afición por la fotografía cofrade. Y por último Compartir mesa con Margarita García en el acto institucional del 8 de marzo de 2022 día de la mujer, en San Roque, con la conferencia "Mujer, Igualdad, Feminismo,   lo vivido y lo soñado"

En la actualidad regenta un pequeño comercio de artesanía y regalo y preside la Asociación denominada “Espacio Cultural Nueva,63” para promover todas las facetas del arte, la cultura y la educación…. Por su gran variedad de eventos, de presentaciones literaria, danza, conciertos, exposiciones, homenajes, coleccionismo, han pasado una gran numero de artista, profesionales y amateur. Estos han sido el deleite del numeroso público al que se suman colegios e instituto, que acuden a las inauguraciones y a exposiciones, dando sentido y apoyo a estos proyectos culturales para promocionar la cultura, el arte y a los artistas, y seguir generando  proyectos ilusionantes  para el futuro próximo  de la mano de todos los amigos artistas o no, que se suman a este proyecto y que son los que lo hacen posible, a quien agradece su apoyo de corazón.  Y todo ello  dando vida a su gran pasión como es  el activismo cultural, la lucha por la Igualdad y  la Justicia Social.

Título del poema: Marina

Marina.

Hoy me siento marinero ilusionado.

 Y desde tierra,

 asomado  a la baranda de mis ojos,

atisbo el horizonte imaginado.

Allí donde las musas generosas,

 tu nombre me susurraron.

Marina.

Eres

Ese mar que me acaricia,

en días atormentados

Ese mar de la existencia,

Suave, cálido

Frío y bravo

 Marina.

Navegando por la vida

Siempre te siento a mi lado.

Marina

Ese puerto al que volver

El puerto de tus abrazos

El puerto de tus anhelos

El puerto de mi descanso

 Marina.

Mi sueño

Mi mar conquistado

Marina

Mi vida, mi amor

Sólo soy

Polizonte enamorado

Anclado en tu corazón

Y en  mi pecho tatuado.

Marina


Segundo premio de poesía para María Coronada Jiménez Muñoz de San Roque.

BIOGRAFÍA: Nací en San Roque , en agosto de 1972. Cursé mis estudios en el colegio Sta. María Coronada y luego en el instituto José Cadalso  también  en San Roque  para trasladarme posteriormente a Cádiz donde me licencié en Filosofía y Letras con la especialidad de Filología Hispańica . 

Durante años me he dedicado a la enseñanza en El Colegio Los Pinos de  Algeciras y en el Acuartelamiento Buenavista preparando a militares profesionales para su ingreso en la academia como profesora de Lengua y Literatura. También he tenido muchos alumnos a los que ayudaba de forma particular durante años.

Desde 2004 trabajo en el Ayuntamiento de San Roque en el que hoy en día desempeño mi actividad profesional como empleada pública.

Desde pequeña escribo porque desde pequeña leo, afición que inculcó mi madre como una prioridad absoluta  y que luego se ha convertido en parte de mi vida.

Hasta hace nada  mis textos no han visto la luz. Todo mi círculo íntimo sabía de mi gusto por la escritura,  pero me faltaba  el valor de enseñarlos. Animada por los míos y viendo que ese pudor no  me aportaba nada sabiendo que afortunadamente la edad sirve para perder temores innecesarios, decidí presentarme a varios concursos de microrrelatos y otros de poesía como es el caso de este 

En algunos me seleccionaron hasta que desde la editorial Diversidad Literaria me propusieron participar en una antología llamada “Encuentros Clandestinos” auspiciada por mecenas, gracias a los cuales resulté ganadora del proyecto  de Crowfounding,

Desde la misma editorial me han dado la posibilidad de  publicación  de un libro, en el que estoy trabajando actualmente  y se publicará, si todo sale bien,  dentro de pocos meses.

Escribo  por una  necesidad íntima que he tenido desde que tengo conciencia de las cosas  y porque escribir, en definitiva, me hace sentir libre.

  Título del poema: El Mar Muerto

I

Todos los días hay alguien que inaugura

su paraíso y lo expone como un triunfo.

Todos los días existe ese mar:

un telón azul, o gris, o verde: frío,

del que alguien se adueña,

hasta convertirse en un ocaso caliente.

Cuando la arena emborriza los sentidos,

todo es más tenue, más liviano.

Hay menos luz ya. Pero hay un segundo

envolvente: rojizo, amarillo, casi rosa

que penetra en la piel.

Y llega la oscuridad: un bálsamo,

 agua estancada que quiero retener.

Y meterme un segundo,

prestado, de colecciones ajenas,

de playas limitadas,

de barcos de papel,

como cáscaras de nuez,

de restos de luces,

de montañas moradas satinadas,

en el atardecer deseado

en ese mar inventado.

II

Tenías una raya debajo de los ojos,

cuando me escuchabas, como ausente.

Yo ayer vi otra raya, en el agua,

cuando te pensaba.

Por encima de la mañana y del mar,

en una excursión de otoño,

cuando el mar está más brillante porque se apaga.

Me gusta que desees mi deseo,

aunque yo no sea nada,

ni siquiera una raya en la arena

de esas que el mar se lleva,

como si nada. 

III

Es el final del principio del otoño.

Octubre que se busca

acoplándose al viento,

a los eucaliptos

que huelen al pasado,

en un lugar que parece el desierto.

El mar sin playa ya.

Sin niños, sin sol enorme.

No hay horas, no hay tiempo.

No hay arena dorada.

Y casi me muero en silencio,

si no creo que detrás de ese mar,

estás tú que navegas por dentro.


Tercer premio de poesía para Mª Dolores García García de Palencia.


BIOGRAFÍA: Nací en un pequeño pueblo de la provincia de Palencia. Cuando tenía siete meses, mis padres se trasladaron a vivir al País Vasco. Cursé la carrera de Filología Hispánica en la Universidad de Deusto.

Con veintisiete años, aprobé las oposiciones de enseñanza secundaria en la asignatura de lengua y literatura en Andalucía y he ejercido como profesora de Instituto en distintos lugares de esta comunidad hasta mi reciente jubilación.
Gané el primer premio en un concurso organizado por el Instituto Cultural Francés con un poema escrito en dicha lengua y alterno el ejercicio de la creatividad literaria con otras aficiones como la cerámica, la lectura o el senderismo.
Actualmente resido en Sevilla pero paso temporadas en París y en Barcelona, donde viven dos de mis hijas.
Siento una gran atracción por el mar  ya que ha sido siempre un referente en mi vida y me hace conectar con la naturaleza.

Título del poema: Calma

En el puerto,

los barcos se mecen embriagados de mar.

Al atardecer, intuyo sus vacilaciones, difumino vagamente sus perfiles.

Cae el sol y las gaviotas, como relieves egipcios petrificados,

se adueñan de la playa

y, poseídas por un resorte roto, picotean desaforadas en la arena.

La brisa refresca mi piel. Me reconforta.

Extiendo la toalla muy cerquita de la orilla,

junto a las olas que, adormecidas, bailan al ritmo de un vaivén suave e infinito.

Me dejo llevar;

quiero acompasarme a ellas

y a veces lo consigo, pero otras veces, tropiezo o me tambaleo entre la espuma

y me hago daño,

pero las gaviotas hacen como que no me ven.

 “Cuánta paz”, suspiro:

los barcos, la brisa, el sol, las olas, la arena, un  cielo azul diáfano,

la espuma, 

la sal.

Todos.

Todos bostezan al unísono en una coral armónica y perfecta.

Cierro mi sombrilla,(“ya no me hace falta”)

y, paralela al filo del horizonte,

me voy quedando dormida.

“Cuánta calma”, susurro,

mientras me abandono en la arena,

que como una experimentada escultora,

va moldeando mi cuerpo a su imagen y semejanza.

“Todo está bien”, me digo

Al atardecer, desde el puerto, 

me van llegando lejanas melodías de sirenas,

“pero las gaviotas hacen como que no las oyen”.


Accésit de poesía para Eugenio Barriola Armida de Cádiz.

BIOGRAFÍA: Nacido en Cádiz, en 1959. Profesional de las Artes Gráficas.

Participante en cursos y talleres literarios de poesía, poesía japonesa, relato corto y microrrelatos.

Algunos premios de poesía y prosa de ámbito provincial. Entre ellos el 2º Premio del V Concurso de Poesía Puerto de Sotogrande 2023

Un libro publicado de poesía llamado “Litoral de Tinta”

Colectivos ArstPoética I y II Fundación Cajasol.   

Colectivo X Congreso Poetas de Ahora                                                                         

Colaborador de varias tertulias literarias, como Tertulia Puerta Abierta, El ventanal, Ateneo Gaditano y Club de letras de la Universidad de Cádiz.

Publicaciones periódicas en varias revistas literarias. (Speculum UCA – Azotea.0     –Tántalo – Desde mi Azotea – Cuadernos Literarios del Ateneo).

Título del poema: Ida y Vuelta

DE IDA
  
Volveré, antes que me venza la tormenta,
antes que las cuadernas resuman la brea,
o que mi quilla zozobre en un bajío desconocido.
Habré conquistado el mundo para ti y,
enterrado, miles de planos en las playas.
Traeré amargos tesoros por tu ausencia y,
un motín de pólvora mojada en los pulmones.
Traeré en los labios la sequedad que el ron regala,
espérame, reina india de las siete tribus sagradas,
que mi piel cuarteada te sirva de abrigo,
que mi pecho tatuado te sirva de nueva biblia,
que mis manos borrachas de maromas te sostengan.
Volveré, antes que en la corte azul de las sirenas
me condenen al destierro de las galernas,
al infinito de vivir en tu ausencia.
  
Y VUELTA
 
Mí capitán, no mi capitán, mi corazón
no quiere tesoros ni planos escondidos.
En tu húmeda morada guardes la fe cierta,
que en mi selva no caben venturas,
salvo aquella que da la vida o las dudas del día.
Mí capitán, sí mi capitán, recuerdo la última vez
que me prometiste el mundo,
que dijiste lo traerías a remolque de una ola roja.
Ahora escucho el silencio, en un seco desierto,
en que siquiera, el canto un grillo, pasaría desapercibido,
porque tú estarás al otro lado del mar,
en ese lado del mar sagrado de praderas sumergidas
cuando brotarán las tres flores, esas que se enredaron
en las grietas de mi vientre: la ilusión, tu sangre y la mía.
Si otra vez dices: “Mi rosa del Sur”,
si otra vez dices: “Mi reina del Pacífico”,
lo escribiré en las cortezas de los árboles del olvido y,
si tienes que perecer, no importa en tierra o mar, al menos
vivirá aquel nuevo grano y será venerado por las siete tribus.
Todo aquel que ame que no tome esa nave,
que no tome esa nave, que se retire del mundo,
que, con los párpados entornados,
desprecie las palabras que ensucian el viejo mar
enloquecido por los vientos desolados.
Y si largo es este quejido, 
es porque largo siempre es el quejido del que ladra o ama.


En cuanto a los relatos, el primer premio lo obtuvo Juan Carlos Pérez López, de Bormujos, Sevilla.

BIOGRAFÍA: Mi nombre es Juan Carlos Pérez López.

Soy de Torreperogil (Jaén), pueblo del que salí cuando apenas tenía nueve años. Ahora resido en Bormujos (Sevilla), pero ni un solo momento de mi vida he dejado de sentirme torreperoxileño por los cuatro costados, aunque me siento plenamente integrado en mi tierra de adopción. 

Tengo publicadas varias novelas: “Noches de ramblas”, “Tres tumbas para un soldado” “Un desfile de sables” “El misionero laico”, y “El bosque de la memoria”, la última que ha visto la luz y que ha sido publicada por la Fundación Alberto Jiménez Becerril como ganadora del XIII Concurso Creadores por la Paz en la modalidad de novela corta. Asimismo, tengo varias antologías personales de relatos publicadas: “Un racimo de premios” “Relatos a la luz de la Torre Oscura” “Encuentros por una Navidad Solidaria”, y muchos de mis relatos han sido recogidos en decenas de antologías corales.

Mi obra de teatro “Un ratico en la pelu” fue puesta en escena por sendas agrupaciones de teatro de mujeres de Porcuna y Doña Mencía.

Entre los más de doscientos diez premios nacionales e internacionales de relatos destaco algunos de ellos:

- Primer Premio en la modalidad de Poesía del XIII Certamen de Poesía y Relato Castillo de Cortegana (Huelva) con la obra titulada “Intervalos”.

- Primer Premio del Certamen Nacional de Relato Corto Fundación Villa de Pedraza (Segovia) con la obra titulada “La maleta de papá”.

- Accésit del X Certamen de Poesía y Cuentos de Navidad Ciudad de Melilla 2009 con la obra titulada “Una carta de Reyes en la telaraña del tiempo”.

- Primer Premio del XXIV Certamen Internacional Álvarez Tendero, de Arjona (Jaén) con la obra titulada “El silbato del tren”.

- Primer Premio del 47 Certamen Cuentos de Navidad “Gloria Fuertes de Elche” con la obra titulada “Un zapatero muy especial”.

- Primer Premio Certamen Internacional de Relato Villa de Montefrío (Granada) con la obra “Maestro o el guardián de la biblioteca de los libros perdidos”.

- Primer Premio del Certamen Internacional de Relato Leopoldo Lasala (Zaragoza) con la obra titulada “El taquillón”.

- Primer Premio del VI Certamen Internacional de Relato “Pablo Olavide” de La Luisiana (Sevilla) por mi obra “Hágase tu voluntad (o El bailarín de los Oxford Full-Grobe)”.

 Título del relato: Retorno a El Berbés             

Valladolid, 23 de agosto de 1916.

Su vida va extinguiéndose como la llama de una vela, la palmatoria amortajada por la calidez de la cera derretida. Lleva varias horas sumido en una soporífera y abisal inconsciencia, como un barco atracado en un muelle abandonado.

Todos presienten cercano un inminente y fatal desenlace. Por ello, ningún familiar abandona la habitación, que está inundada por el murmullo de los rezos, que parece formar una marejada litúrgica en la que el hombre se siente un naufrago que, apenas con un hilo de vida y carente de fuerzas, es arrastrado muy lejos de su lecho de muerte… 

Vigo, primera mitad del siglo XIX.

El hombre es zarandeado por un espasmo cuando el agua fría del cantábrico envuelve sus pies desnudos. Observa sus manos, ahora carentes de la pátina de manchas que el paso del tiempo abandonó sobre ellas. Toca su cara, la piel suave y tersa por ensalmo. Encara el horizonte, allá donde se hermanan cielo y mar. La brisa está cargada de un helor que le reaviva los sentidos. El rosicler disemina una luz imprecisa y borrascosa sobre la apaciguada lámina refulgente del océano, bruñendo las aguas con un tornasol malva. Súbito, se levanta un vendaval que enmaraña sus cabellos. El viento aúlla como un lobo herido sobre los restos apocalípticos del portentoso cinturón de piedra que otrora mantuvo a Vigo a salvo de los ataques de corsarios como Drake, aunque también de las flotas militares extranjeras y de las avanzadillas terrestres del ejército portugués. La que en su día fue levantada como una fortaleza inexpugnable, ahora se muestra ante los ojos de Serafín como un bastión derruido en el que antaño él y sus amigos se inventaron como protagonistas de heroicas batallas, durante su infancia ellos responsables únicos del hundimiento de la ingente armada de galeones que quedó reducida a una flota enemiga de pecios que, tras la cruenta batalla de Rande, acaecida el 23 de octubre de 1702, yace diseminada en las profundidades de la entrada de la ría de Vigo. Sonríe Serafín al creerse un marino inmortal que ha sobrevivido a todas las batallas que la vida le ha planteado, ahora inmerso en la definitiva.

El silbo melancólico del aire húmedo pregona una letanía de augurios de helor súbito por las calles limítrofes al lugar donde se encuentra el hombre. La maresía, que llega en oleadas fantasmagóricas de ultramar, se extiende como una metástasis por los arenales y por el puerto. Ráfagas aguanosas y salitres lamen el muelle de cabo a punta, y parecen cortejar un ciclópeo y solitario noray que ha sobrevivido a cuantas galernas osaron atacarlo con su bravío oleaje. Una mano invisible parece acunar con mansedumbre las barcas del fondeadero. Serafín respira hondo. Se siente feliz regresando a El Berbés que conoció durante su infancia, un barrio extramuros de Vigo donde, desde tiempos inmemoriales, sus vecinos viven exclusivamente de la pesca, principal actividad económica de la ciudad.

La marea ha retrocedido. Sobre la arena, las embarcaciones, las nasas y las cestas de mimbre parecen estar esparcidas al igual que lo están las conchas de los moluscos que desprecia la mar. El aspecto del cielo, pintarrajeado por desgarrones plomizos, barrunta tormenta. El Atlántico no dudará en mostrar su oceánica acritud a los pescadores que osen echar las redes a sus entrañas. La sacrificada vida de cuantos faenan en la mar, y de cuantos velan su regreso, se enlentecerá hasta límites insoportables, abrumados por la luz del cielo, que desfallecerá de manera urgente para luego espejar de manera apesadumbrada no solo en las crestas del oleaje que levanta la mar arbolada, sino también en el pavimento de las calles, y terminará cubriendo el horizonte, y a la misma ciudad de Vigo, con un tabardo de grisácea melancólica.

Sin dudarlo un segundo, Serafín decide “perderse” por Vigo. Disfruta sobremanera redescubriendo la ciudad, como si anduviese por ella por vez primera y cogido de la mano de sus padres: la calle Alta, Peligros, San Julián… Las plazas de Pescadores o el Peñasco... Le cautivaba esa larga caminata a primera hora de la mañana, adentrado en el laberíntico entramado de callejas estrechas y empinadas que dan forma al barrio de El Berbés, también conocido como de la Ribera. Se cruza con mujeres que llevan sobre sus cabezas patelas fabricadas con tiras de castañero, y que van colmadas de sardinas, besugos, rapes, xoubas y todo tipo de mariscos… Frutos de la mar con los que surten los puestos ambulantes de pescado de las plazas y las cocinas de las fondas. Anega sus pulmones el aroma del mar que, entre aquellas estrechas calles, se mixtura sin remedio con la fragancia de las casas recién encaladas. Sin reconocer a nadie, no deja de saludar a la gente en todo momento. Sin saber por qué, todo el mundo se acerca a estrecharle la mano; dar un solo paso supone una verdadera proeza.

Después del largo paseo, Serafín descansa sentado en la playa, la espalda apoyada en la amura de una barcaza. Usando un trozo de una caña, realiza un precioso dibujo sobre la húmeda arena. Le parece escuchar las inconfundibles notas de “La Traviata”. Levanta la cabeza. Se pone en pie. Se coloca la mano en la frente, a modo de visera. Como un vigía a pie firme en la cofa del palo mayor, a lo lejos descubre un nutrido grupo de personas. Alguien le hace gestos, como invitándolo a que se una a ellos. Serafín lo reconoce sin duda: es su amigo Giuseppe Verdi, el gran compositor italiano, con quien trabó una sincera amistad durante su larga y fructífera estancia en Italia. A su lado se encuentra el pintor realista, y maestro que fue de él, Carlos Haes. Serafín Avendaño corre a su encuentro, para fundirse con ellos en un abrazo eterno… 

La consternación se extiende como una mácula de duelo por la habitación donde acaba de fallecer el vigués, y gran pintor paisajista, Serafín Avendaño.


El accésit de relatos lo obtuvo Ricardo Cano García, de Zaragoza.

BIOGRAFÍA: Ricardo Cano García nació en Gijón (Asturias) en 1964. Creció en Madrid y recorrió España, Estados Unidos y Noruega, para acabar estableciéndose en Zaragoza, donde vive con su mujer.

Coqueteó con la psicología, la informática y los idiomas, hasta acabar descubriendo el placer de la escritura.

Si bien su monografía «Uso Militar del Espacio» recibió el Premio Defensa a trabajos de Estudio e Investigación en el año 2001, su actividad propiamente literaria no se inició hasta dos décadas después. Sus primeros éxitos lo animaron a continuar escribiendo, y a día de hoy son diecinueve los reconocimientos conseguidos en el campo de la narración breve, entre los que figuran los primeros premios del Concurso de Cuentos Villa de Errentería (2021), el Certamen de Narraciones Breves «Hermanos Caba» (2022), el Concurso de Relatos Cortos «Asociación San Francisco de Sales de Hipoacúsicos» (2023) y el Concurso Internacional de Relato Corto «Elena Soriano» (2024).

 Título del relato: A tu amor se lo tragará el mar

«A tu amor se lo tragará el mar». Es todo lo que caló en mi memoria. La echadora de cartas se anunciaba como vidente y tarotista, y sus augurios incluyeron viajes, hijos y buenaventuras varias. Pero todas sus palabras fueron sepultadas por tan lapidaria frase.

A tu amor se lo tragará el mar. Y nada importaba que ese mar junto al que vivía fingiera sosiego e indiferencia, porque bien sabía yo que el mar océano, cuando se enoja, muta en un ser poderoso contra el que nada pueden los hombres, ni las naves, ni la pasión.

Pero no iba a ponérselo fácil al destino, y por ello juré nunca enamorarme de un hombre de mar, porque nadie podría robarme aquello a lo que yo renunciaba, y porque aún vivía en mi memoria el recuerdo de los cuatro tripulantes del Pequeño Abel, atrapados por un Leviatán que jugó con ellos durante horas para acabar arrojándolos contra los arrecifes. Y porque «a tu amor se lo tragará el mar», a quien los suspiros saben a naufragio y que en nada estima la vida de las efímeras criaturas que profanan sus dominios.

Huir no era una opción. No abandonaría la tierra que me vio nacer, ni la playa que conoció mis primeros pasos. No lo hicieron las viudas del Pequeño Abel y no lo haría yo, que ni siquiera aspiraba a alcanzar la noble condición de viudedad, condenándome en su lugar a la mucho más vulgar de soltería. ¿Cómo decir adiós a ese amante que nunca se cansó de besar mis pies? A los tesoros que la resaca descubría para mí. A las mañanas de bruma y de misterio, los cielos incendiados de esperanzas y las noches preñadas de anhelos. El mar era un brujo que me seducía con su voz de magia y salitre. Cada rincón de esa costa –el puerto de pescadores, la Marina, la playa– estaba tejido en el tapiz de mi vida, y alejarme de ella sería como arrancarme el alma. No podía renunciar a mi trabajo en la Marina, pero sí podía buscar la soledad ofreciéndome para cubrir el turno de noche. Y así, apartada de la gente y vacío mi corazón de sueños de amor verdadero, me refugié en mi hogar. La casa de la playa. La casa desde la que veía, escuchaba y sentía el mar. La casa que mi abuelo levantó con sus propias manos y que hundía sus cimientos en la arena. La ley de costas nunca habría permitido una vivienda que se acercaba con tanta insolencia al agua, pero en aquella época faltaban muchos años para que alguien se planteara poner orden en el litoral. Pequeña, recoleta y abrazada por el mar, era la casa ideal para mí. Hice de ella el templo de mis sueños, custodio de recuerdos y báculo en mis noches de soledad. Y así quedé atrapada entre una casa y un trabajo que me anclaban a esta tierra y una escollera nacida de miedos ancestrales y cimentada sobre historias de naufragios que blindaba mi corazón, forzándome a sofocar pasiones, desoír promesas de amor y rechazar proyectos de vida en común. Y con cada rechazo mi criterio se hacía más firme, y más profundo mi pesar.

La muerte siguió visitando el pueblo como siempre lo había hecho, desprovista de criterio, aunque nunca el mar exigió nuevas presas. Y un día descubrí que en mi empeño por escapar del vaticinio de la pitonisa había renunciado a esos viajes, hijos y buenaventuras que el demiurgo me tenía reservados, y mi mundo había quedado reducido a mis paseos por la arena, mis horas contemplando el mar y mi casa. La casa de la playa. La casa que gustaba de recibir la caricia de las olas, que contaba historias de hombres valientes y que era mi refugio, mi bastión y mi consuelo. Y tuve miedo del abrazo de la soledad y de un futuro frío y gris. Y lloré. Lloré por las oportunidades perdidas, por la tripulación del Pequeño Abel y por una vida truncada por unas cartas ungidas de infortunio que alguien puso ante mí.

Pero nadie puede burlar al destino. La ola surgió en el horizonte, nacida de las entrañas del océano. Fuerzas que escapan a la imaginación levantaron un muro de agua y lo empujaron contra la costa con el poder destructor de mil mareas. El malecón protegía la Marina y el puerto de pescadores, pero nada había que diera resguardo a la playa. El mar entró en ella reclamando lo que era suyo, arrancando la casa de sus cimientos… y llevándosela con él.

En agosto finaliza el III concurso de relato cortos y el VI de poesía que convoca Puerto Sotogrande

En agosto de este año 2024 se cierra el III concurso de relatos cortos y VI de poesía que el Puerto de Sotogrande convoca cada año con la colaboración de Palabreando y con un jurado de alto nivel compuesto de importantes escritores de la comarca de la Bahía de Algeciras.

Premios importantes y un evento de entrega de premios en un paraje excepcional como es Sotogrande.

No te lo pienses más y participa. Lo importante es disfrutar escribiendo.

Aquí os dejo las bases. leedlas bien y a participar que queda poco tiempo.





LANZAMIENTO CONCURSO DE POESÍA Y RELATO PUERTO SOTOGRANDE

Un año más el Puerto de Sotogrande conjuntamente con Palabreando, taller de escritura, lanzan el V Concurso de Poesía y el II de relatos cortos.

El concurso de poesía ya es un certamen que se ha afianzado y el de relato, que comenzó por primera vez el año pasado, sigue su andadura con perspectivas de una buena participación. 

El jurado compuesto por escritores relevantes del panorama cultural del Campo de Gibraltar y Málaga, serán los encargados de decidir el fallo final de los mismos.

La participación permite mandar los trabajos tanto en español como en lengua inglesa.

Una vez cerrado el plazo, los premios se darán en un un lugar determinado del Puerto de Sotogrande, en el VII Encuentro poético musical, antes de finalizar el año.

 
Las bases para participar son las siguientes:




Cualquier aclaración al respecto y recepción de obras se hará a través del mail de Palabreando:

FALLO CONCURSO POESÍA Y RELATO DÍA DE LA MADRE

Desde Palabreando, taller de escritura, damos la enhorabuena a los ganadores del I Concurso de poesía y relato Día de la Madre. 

Para ser el I concurso que lanzamos con el tema de la madre, hemos tenido una participación bastante considerable tanto de hombres como mujeres, como de edades y lugares. Los premios están muy repartidos.

A continuación publicamos los nombres  de los ganadores y finalistas y mañana se publicarán sus escritos:

POESÍA

1er. premio: GUSTAVO PABLO REYES ESCALONA de Cuba. 58 años.

Título: SIEMPRE

2º. premio: JUAN ANTONIO LÓPEZ FERNÁNDEZ. (Seudónimo: Juan Antonio Almandado) de Algeciras (Cádiz) pero reside en San Luis de Sabinillas (Málaga). 59 años.

Título: MADRE

3º. premio: MARI LOLI ROMERO LÓPEZ de Barbate (Cádiz). 69 años.

Título: ODA A MARÍA LÓPEZ

1er. finalista: MANUEL JESÚS GARNICA CORBACHO de Algeciras. 19 años.

Título: TODOS LOS DOMINGOS DEL AÑO

2º. finalista: MARÍA DEL MAR NAVARRO FERNÁNDEZ de Estepona. 56 años.

Título: DULCE MADRE

3er. finalista: MARI LUZ REYES MUÑÍZ de Estepona (Málaga). 59 años.

Título: CATORCE AÑOS


RELATOS

1er. premio: MARIBEL SÁNCHEZ GONZÁLEZ de Jimena de la Frontera (Cádiz) pero reside en Algeciras. 59 años.

TÍTULO: LA NOCHE PASADA

2º. premio: MARI LUZ REYES MUÑÍZ de Estepona (Málaga). 59 años.

TÍTULO: CARTA A MARÍA

3er. premio: VERÓNICA SCHENNEL OTTATI de Venezuela. 34 años.

TÍTULO: VOCES DEL CAMINO


En el concurso de relatos, aunque hemos tenido un alto índice de participación, el jurado ha decidido dejar desierto el apartado de los finalistas porque o no cumplían las bases o no tenían la calidad suficiente.

¡Enhorabuena a los ganadores y gracias a todos los participantes! Os animamos a seguir escribiendo y participando en los siguientes concursos que lancemos.

CONCURSO DE POESÍA Y RELATO. DÍA DE LA MADRE

Concurso relatos y poesia Día de la Madre. Organiza Palabreando taller de escritura.

Plazo Max. de recepción hasta las 24:00 del día 6 de mayo.



Bases:

- Dar a seguir a ESTE BLOG, está en la parte de arriba, encima de los post.

- temática SOBRE LAS MADRES.

- Mandar poesía Max. 40 versos. Sin contar el título.

- Mandar relato Max 1000 palabras. Sin contar el título. 

- Enviar a tallerescrituranrf@gmail.com con el asunto CONCURSO RELATO o CONCURSO POESÍA.  Dos archivos word. Uno con datos personales y título de la obra y el otro con la obra y el título. 

- Los poemas y relatos ganadores serán publicados en esta página de Palabreando.

- El primer premio de poesia y relato recibirá un libro en pdf sobre el arte de escribir o similar  y un diploma.

-El segundo premio de poesía y relato recibirá un diploma.

- Los 3 finalistas de cada género se publicarán en la página de Palabreando. 

- Los premios pueden quedar desiertos si el jurado así lo decide.

FALLO CONCURSO RELATOS DE SAN VALENTÍN

Fallo del concurso de relatos Día de San Valentín.




El jurado del I Concurso de relatos de San Valentín de Palabreando, taller escritura, han elegido los tres relatos ganadores y son los siguientes :

1er. Premio: ALICIA FDEZ. MORALES de Algeciras. RELATO: El tiempo

2.º Premio:  KEYTHLEEN G. ESCOTO de Nicaragua. RELATO: Un atardecer en San Rafael

3er. Premio: VIRGINIA RUBIO RODRÍGUEZ de Algeciras. RELATO: El arado que no sabía qué decir

Los 5 finalistas por orden de puntuación, de mayor a menor, son:

1.- GABRIELE HEFELE (pseudónimo Gabriela de la Torre - Manilva-) de Baviera. RELATO: Romeo y Julieta en la pradera.

2.- PEDRO GARCÍA MARTOS de Cádiz. RELATO: El amor del olvido

3.- ESTHER RUBIO RODRÍGUEZ de Algeciras. RELATO: Fuente, campo e iglesia.

4.- JOSÉ TÉLLEZ GAVILÁN de San Roque. RELATO: Julia, Alberto y una ventana pintada en el cielo

5.- MERCEDES TÉLLEZ GAVILÁN de Algeciras. RELATO: Almas gemelas

El I Concurso de relatos de San Valentín ha sido todo un éxito, con una participación superior a lo que se esperaba para ser el primer certamen.
El jurado lo ha tenido difícil para decidir a los ganadores y a los finalistas, pero al final lo han conseguido.

Los relatos ganadores y los finalistas tienen una gran calidad literaria. Desde Palabreando, taller escritura, queremos dar la enhorabuena a los ganadores y finalistas y dar las gracias   los participantes, animándolos a seguir participando.

En breve serán publicados los 3 relatos ganadores en este blog. Además recibirán el certificado de participación en sus respectivos mail, junto con el libro en pdf que le corresponde al primer relato ganador.

FALLO DEL 1er. CERTAMEN DE POESÍA Y RELATO DE NAVIDAD

Ya tenemos a los ganadores del 1er Certamen de Poesía y Relato de Palabreando Taller de escritura. El arte de escribir. Ha estado bastante reñido pero los compañeros del jurado han conseguido ponerse de acuerdo.



Como decía en las bases, el 1er. premio de poesía y de relato se llevarán de regalo un libro en PDF titulado "Saca al escritor que llevas dentro" trucos para escribir mejor.
Y como estamos en Navidad y aunque esté fuera de las bases, a los 2º y 3er. premios y a las menciones especiales, le vamos a hacer entrega de un libro en PDF titulado "Manual de emergencias para escritores" como regalo de Reyes.
Además, todos los relatos y poesías serán publicados, en breve:

GANADORES DEL I PREMIO DE POESÍA, SON:
1º CARMEN GALET MACEDO (CÁCERES), poesía: SIN ANUNCIO DE LA NAVIDAD
2º NOELIA GARCÍA ROMÁN (ALGECIRAS), poesía: LLEGA LA NAVIDAD
3º CONCEPCIÓN RODRÍGUEZ RODRÍGUEZ (ALGECIRAS), poesía: NAVIDAD
GANADORES DEL I PREMIO DE RELATO DE PALABREANDO TALLER DE ESCRITUTRA SON:
1º JUAN BARRENO GONZÁLEZ (ALGECIRAS), relato: NOCHEBUENA DE 1993
2º PILAR FDEZ. DE TORRES (SAN ROQUE), relato: LA GRAN NOCHE
3º Mª CARMEN GUERRERO PÉREZ (ALGECIRAS), relato: ENTRE LUCES Y SOMBRAS
MENCIÓN ESPECIAL EN RELATOS A:
1º JUANA MARÍA ANDRADES NAVARRO (ALGECIRAS), relato: UN PEQUEÑO MILAGRO
2º FRANCISCO LÓPEZ MONROY (ALGECIRAS), relato: LA NAVIDAD DE MARÍA

25N. DÍA CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO. POEMAS, RELATOS Y ARTÍCULOS SELECCIONADOS.

Hoy día 25N. Palabreando, taller de escritura, se suma a la celebración CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO. 

Y lo hacemos a través de la palabra, porque como dijo Gabriel Celaya: "La palabra es un arma cargada de futuro".

Hemos seleccionado -de entre más de 20 trabajos que hemos recibido- 8 relatos, 4 poemas y 1 artículo de opinión, de los cuales 3 participaciones corresponden a hombres. 

Esperamos disfrutéis de sus letras.

POEMAS

Esther Montoya                                                                                            

Diana

Diana, mi amiga, no creas que eso es vida,

pues así como hoy te mira, mañana pagarás su ira.

Hay otra opción, 

una que te vendrá mejor, donde puedes ser libre, 

sin nadie que te desequilibre.

Vales por lo que eres, y por lo que transmites a tus seres,

mereces desarrollar tus capacidades, si te apetece, en universidades.

No es tu culpa que te quieran mal, no hiciste nada malo,

no hubo nada vulgar, porque tú sola, ya eres un regalo.

No hace falta tener hijos, para abandonar el nido,

y si sola tú no puedes, busca ayuda, no te quedes.

No importa si eres buena o mala,

si eres simpática, o apresurada.

Si vas por la calle y te encuentras asustada,

cógete de mi brazo, te ayudaré encantada.

Que no te maten con palabras,

pero tampoco con navajas,

Que te maten a besos

y que dejen en paz tus huesos.

Hay hombres buenos y malos,

pero no todos nos matan con sus disparos.

Si tienes la suerte de conocer a uno, puedes quedarte, si quieres,

pero no caigas en los vicios, esos que te quitan tus poderes.

Diana quiérete, tu nacimiento no fue en vano,

papá y mamá aún caminan de tu mano.

No te criaron como reina, ni princesa,

sino como su más fiel promesa. 

No trates de esconder tu llanto,

pues no lo necesitarás, allá en el camposanto.

Pelea, grita fuerte y lucha aquí,

todos celebraremos que hayas elegido vivir.


Carmen Trella Vida                                                          

Vuela mariposa

Te detienes a tomar aire, tus alas están heridas y cansadas.

Aún sientes sus golpes en tu frágil cuerpo,

y tiemblas temiendo que te vuelva a tocar.

Sus gritos resuenan en tu cabeza, y no quieres regresar.

Apenas te quedan lágrimas que derramar,

y, aun así, dos perlas recorren tus mejillas

al recordar su ira sobre ti.

Se esfumaron tus ganas de soñar,

te arrancó tus ilusiones y se llevó tu magia al volar.

En su afán de posesión,

quebró tus bellas alas,

anuló tu voluntad y apagó tu sonrisa.

Quiso encerrarte para él solo,

no soportaba que nadie contemplara tu belleza.

Insignificante te hizo sentir cuando te veía feliz.

Ahora que has huido,confía en tus fuerzas y en tus ganas de vivir,

hay un precioso mundo por descubrir.

Déjate llevar por el viento hacia nuevos horizontes,

lejos, muy lejos, donde no consiga herirte más,

donde puedas ser tú misma en libertad.

Vuela mariposa, vuela alto, que ya no te alcanzará.

 

Alicia Morales Fdez.                                                                 

Maltrato

Aquella noche me llovió por dentro,

hubo tormenta, tempestad

los rayos abrían heridas en mi carne.

¡Cuánta sangre!

¡Cuánta lágrima perdida marchita!

Huir, solo huir gritaba mi cabeza.

Cobijo, solo cobijarme en una esquina, 

una idea, una palabra.

Tanto dolor cabe en un segundo.

El tiempo se paró riendo de mi suerte.

Y el miedo entró por mi pasillo.

Miré: nadie, nadie,

solo tú gritándome en la oreja.

Y pensé que el amor se burla de los fuertes.


Adrian Van Loon                                                                      

Un beso

Me mirabas con tanta fuerza, 

tan fuerte, que me dejaste “paralizado”.

No me podía mover atraído por tus ojos,

ojos que querían decir mucho.

Pero ese "mucho" no llegaba. 

No. No

Porque yo solo quería darte un beso de saludo. 

No más.

Un beso que es tan normal.

Un beso de “hola” o buenos días

O de buenas noches o adiós.

Y solo de amistad. Y de respeto

Un beso tan normal. ¡Tan normal! 

Es normal para otras 

aunque no para ti. No.

De golpe, dabas la vuelta,

dejándome de nuevo “paralizado”. 

Me sentía avergonzado,

porque no tuve ninguna mala intención.

Y de pronto me llené de recuerdos.

Recuerdos de muchas otras mujeres.

Buenas amigas y colegas conocidas,

afectadas por mal trato y brutal violencia,

por sus novio o maridos o cualquier otra bestia,

dejándolas fuera de esta tierra

De esta tierra para siempre... 

En memoria y honor de las buenas amigas que he perdido.

Y todas las otras mujeres fallecidos por maltrato de género.

Y todas que lo sufren cada día. 


RELATOS

Elena Novoa                                      

Un "amor" que me aleja de mí no merece llamarse amor.  


En el "amor" existen "normas no escritas" que las mujeres asumimos como nuestras, como parte de unos "deberes" impuestos a través del tiempo para ser una buena novia/pareja/esposa/madre/santa o perra. Nadie nos las explica, simplemente las observamos.        

Complacer, servir, "ayudar"," amar", callar, sobrellevar, reprimir, temer, ceder ; son algunos verbos que se clavan en el pecho y que ahogan el llanto en la garganta.

El disimulo se transforma en una máscara que instalamos cada mañana para que nadie pueda descifrar nuestra alma. Nos percibimos como seres extraños cuando nos miramos a un espejo feroz y lastimoso, que nos dice como estamos realmente. Sentimientos como la culpa, que nada en un mar angosto, quebrando nuestra esencia y despojándonos de todo lo que un día fuimos.

El miedo, la ansiedad y la depresión, la triada perfecta que nos acompañan, circulan de la mano transitando un camino al que llamamos "amor".

El "amor" no todo lo puede. Y si me aleja de mi misma no es amor.

Un "amor" vehemente que malquiere, que nos hace lamernos las heridas sobre un asfalto frío, para continuar corriendo, escondiéndonos y temiendo.

Un "amor" que vilmente mancilla el nombre del verdadero amor, en el más amplio sentido de la palabra, el que se sabe camarada, respetado, amado, pero sobre todo Libre por encima de todas las cosas.

Nos enamoramos de la idea del "amor", cuando  "esa palabra" se escribe más allá del amor romántico. El amor tóxico que nos reduce a la mínima ecuación, llegando a desaparecer. Cuando la realidad nos aprieta el cuello para recordarnos que debemos huir de allí, recoger nuestro valor del suelo, recoger nuestras alas y alzar el vuelo sin volver a mirar atrás.

Un "amor" que me aleja de mí no merece llamarse amor.


Carmen Galet Macedo

Del laberinto al treinta                                                           

Ahora comprendo por qué no tenías tiempo para mí, siempre tan 

ocupado. A decir verdad, no entendía el porqué, ni una sola vez 

fuiste capaz de sincerarte, de contar todo aquello que llevabas 

dentro de ti. Tampoco conseguimos intimar, cuando me abría a ti, no escuchabas. Estabas ajeno, con el pensamiento en otra parte, y tú, ni siquiera hiciste un intento de aproximación. Supongo que yo te importaba tan poco, como cualquier otra persona, como tantas que despiertan tu curiosidad por un tiempo, y después te terminan hastiando. Claro, que la diferencia entre ellas y yo no era sutil, con ellas fantaseabas unos pocos meses, después la curiosidad se te dormía. Conmigo llevabas la carga de 29 años de convivencia y dos hijos en común. Ya no querías participar en ningún juego conmigo, decías que te aburrían. Excepto el juego de la oca. Te las ingeniabas para transformar la suerte siempre a tu favor, en realidad era al azar a quien retabas, y no a mí. Cuando eras consciente de ello, sí que le ponías la emoción.

Lo tuviste más fácil para moverte en el tablero de juego. Te lo pensabas muy bien para hacerme caer en las casillas 19, la posada (2 turnos sin tirar), la 42, el laberinto (retroceder al 30) o la 52 (tres turnos para que me rescatasen). Me mantenías retenida en aquellas figuras del juego que servían para justificar que yo debía esperar y tu avanzar, invariablemente a tu capricho. Recuerdo cada vez que me decías adiós, satisfecho, cuando llegabas a la 59, pasabas por delante de mí, que acababa de caer en la 58, la casilla de la calavera, que me obligaba a volver al principio. El azar tenía poco que ver con que te movieras por las casillas 5, 14, 18…siempre ibas de "oca a oca y tiro porque me toca”. Todo estaba estudiado.

Entrabas y salías de nuestro tablero como y cuando querías. Para ello tenías que hacerme retroceder o esperar en alguno de los recuadros desagradables. No tuviste inconveniente en ignorar a quién dejabas atrás, cada dos por tres.

Jugaba a la oca por pura rutina, por la dependencia que crea el juego de dominio y ser dominado, porque creía que era lo que me había tocado en suerte y nada podía hacer para cambiar mi vida.  Así que adquirí sin querer este hábito absurdo de estar siempre en la sombra. La alegría de los niños me compensaba en algunas ocasiones. En otras, luchaba por combatir la tristeza y la desidia, que me arrastraban a ese lugar oscuro y sin esperanzas de la casilla 31, el pozo.

Podría haber abandonado ese juego de esperas, mentiras y engaños, pero no lo hice, e intenté ser feliz en el infierno de promesas incumplidas en aquel pasatiempo. Necesitaba creer que alguna sería cierta, y tal vez, la vida menos amarga.

Pero llegó un día, en el que el azar hizo que aparecieran en mis dados el 6, el número que llevó mi ficha directa al puente. De forma imprevista, mi boca pronunció “de puente a puente y tiro porque me lleva la corriente” y con un entusiasmo impropio en mí, avancé hasta la casilla 12. Iba embalada y nada me detendría. En algunas tiradas más llegué a la 63, el jardín de la oca, la última ficha del juego.

Me sentí eufórica, pero no por haber ganado. Mi felicidad apareció cuando descubrí que, desde el puente, la corriente me deslizaba a donde yo deseaba llegar, y en el viaje observé que la dirección del agua impedía dar marcha atrás. “Hacia delante” me dije. Había tomado la primera decisión, la que te ayuda a encontrar la salida del laberinto y a comprobar que las sombras se desvanecen si consigues llegar donde está la luz.

La paradoja está en que cuando abandoné el juego, en cada decisión que tomaba, me repetía a mí misma “es mi turno” y daba un paso adelante que me acercaba cada vez más a mis sueños, a mis metas y a la alegría de tener los ojos bien abiertos. Con un puntapié, lancé muy lejos aquel maldito juego que me atrapaba y me enviaba del laberinto al 30. Este movimiento tan simple de mi pie, resultó ser el acto más revolucionario de mi vida y el que me devolvió la sensatez y la coherencia.

Amo la paz, pero te animo a mirar de frente y dar un puntapié a todo aquello que te atrape el deseo de algo diferente, el amor o la dignidad. 


José Téllez Gavilán     

   Rosario                                                           

He estado callada por mucho tiempo, he  sido una mujer de silencios, solo con las flores hablaba. 

Mi mundo era la cocina y aquel pequeño patio donde me refugiaba en la compañía de mis flores, siempre callada y sabía que había perdido el norte, bien podía haber sido una estatua de ojos vacíos.

Todo era silencio, silencio y silencio, hasta que me acostumbre al silencio de las estrellas y la luna.Entonces descubrí que en el silencio de la poesía existían voces que me hablaban y comencé a  inventarme a mi misma; la que podía ahora pensar por mi misma, la que reía y lloraba sin que nadie me lo ordenara.

Y escuché el sonido de las olas, allá abajo en el puerto y la llamada del barco y descubrí que había un mundo de sonidos mas allá de mi patio y... me marché   


Juan Emilio Ríos Vera     

POR EL MERO HECHO DE SER MUJER                                          

Ella, por el mero hecho de ser niña, no podía estudiar las maravillas de la Naturaleza ni mucho menos las delicias de la Cultura y el Arte. Siempre en casa, para ella estaba asignado una vida rutinaria que solo estaba orientada al cuidado de la casa y de sus hermanos menores y recibir las explicaciones de su madre acerca de cómo ser en un futuro bastante cercano ya una buena esposa y una excelente madre.

No podía ir a la escuela, pues la ley de su país no lo permitía, por ello, tuvo que pedirle a su hermano menor, que le prestara por las noches su libro de lectura y que le diera algunas lecciones sobre escritura y ortografía. En ellos encontró las maravillas que le negaban.

La poesía pronto le apasionó y tras leer todos los poemas que figuraban en los escasos libros a su alcance logró escribir sus primeras estrofas llenas de anhelos y utopías.

Se convirtió en una gran escritora que escribía solo para sus ojos. Escribió poemas y cuentos para niños, libros de viajes imaginarios e historias de amor que protagonizaban otros. 

Y un buen día una bocanada de aire llegó al país y un gobierno más moderno y progresista se hizo cargo de la nación y entre sus muchas revoluciones le dio a la mujer la posibilidad de trabajar y de estudiar y ella, con lágrimas en los ojos, consiguió impartir clases en una academia y consiguió estudiar en la Universidad las materias que tanto le apasionaban, pero a las que no había podido tener acceso.

Ayudó en su aula a muchos hombres que antes la habían despreciado.

Ella se hizo a sí misma. Y ahora se siente señora, dama, reina, diosa… mujer nada más ni nada menos.


Juana Andrades

SIGUE TU CAMINO         


La chica estaba en la calle medio vestida y desorientada, por lo que la hice entrar en casa. De su nariz y de la comisura de sus labios manaba sangre. Ni siquiera le pregunté qué le ocurría, no era la primera vez que oía peleas y palabras malsonantes en el piso de arriba. Con mi gesto quise decirle: yo te creo.

La ayudé en lo que pude. Aquella noche, la instalé en el cuarto de mi hijo que estaba estudiando fuera y le dije que quizás debería llamar a sus padres. Ella al principio se mostró reacia diciendo que sería algo pasajero, sin embargo, cuando más tarde, escuchó que él aporreaba mi puerta y maldecía de nuevo, no dudó en llamarlos.

Al día siguiente, se despidió dándome las gracias entre sollozos. Yo me quedé con el corazón encogido, pero contenta porque por fin se iba lejos de aquel tipo.

De esta historia hace ya unos diez años. Hoy he vuelto a recordar a mi vecina porque en las noticias ha salido su exmarido. Por lo visto se volvió a casar y trataba igual a su nueva esposa. Esta no tuvo tanta suerte como mi amiga. Ella no pudo escapar a tiempo y apareció asesinada en la puerta del colegio de su hija.

Rezo para que algún día dejen de ocurrir estos sucesos y nos demos cuenta de que nadie es mejor que nadie. Solo somos personas y como tales debemos convivir y respetarnos. Si algo no nos conviene o nos disgusta, solo debemos decir: sigue tu camino que yo seguiré el mío. Tan fácil como eso.

Hombres y mujeres somos iguales y como tales hemos de convivir.


Mamen Sanz Trelles

No es una película clase B            

Temblaba emocionada cuando se enrollaron. Era el chico más carismático del Instituto: atractivo, deportista, simpático. Todas sus compañeras andaban tras él.

 Bueno, todas no. Alexandra, la capitana del equipo de balonmano de Bachillerato, le advirtió que era un posesivo.

« Eso lo dice porque fue él quien la dejó. Está acostumbrada a ser la que corta; Josué es muy abierto». —Y sonrió embobada.

María, su rival en matemáticas, también la avisó. Huyó a tiempo de esa relación cuando la empezó a acosar si salía sin él.

«Envidia, eso es lo que me tiene, siempre ha sido así. Nunca consigue quitarme la matrícula de honor, y ahora esto».

Rocío, su hermana, le fue con historias sobre él con tintes de violencia sexual que las víctimas callaban por vergüenza.

«No pueden ser verdad, él sería incapaz de usar la fuerza. ¡Es todo ternura!».—le reprochó

Dejó de hablarle y se cambió de dormitorio.

 Temblaba asustada cuando la sacó a empujones de la fiesta de una amiga: —«¡No lo he avisado, pobre! , ¡qué mal rato le he dado!».

 Temblaba el día que le levantó el puño y se lo estampó en el hombro después de decirle puta. Un error, iba para su mandíbula. —«¡Lo que lloró arrepentido!, y yo más, por ponerme aquellos shorts» recordaba.

 Dejó de temblar para siempre cuando su cuerpo se desplomó con la cabeza reventada, después de que él la estampara una y otra vez contra el muro del Instituto. Habían quedado después de clase para celebrar que le habían concedido una beca para estudiar fuera.

 Temblaba la madre de Josué mientras se afanaba en maquillar las magulladuras de la cara.

«Me las he ganado, soy la culpable de que mi hijo esté detenido».


 Mª del Carmen Guerrero Pérez                                                

Bofetadas invisibles    

Ella esperaba junto a la ventana, eran las siete. No sabía cómo llegaría hoy su marido, el que, en un tiempo pasado,  había sido el amor de su vida. Recibía, día tras días, bofetadas invisibles que no dejaban marcas evidentes en los demás, pero si una profunda huella en su corazón, autoestima y valía. Bofetadas como “tú no vales nada”, “eres un despojo”, “todo lo que eres es gracias a mí” y silencios permanentes de indiferencia.

Ella callaba, sabía que era mejor así.

Si el día era bueno, él se comportaba como el amor que ella conoció y se confiaba con fe ciega, con la esperanza de que él había cambiado, hasta que volvía la bofetada, limpia, seca y sin dejar marca patente. Su corazón, su autoestima y su seguridad en sí misma, estaban profundamente quebrantados.

Pero ese día sería diferente.

Ella esperaba junto a la ventana con una pequeña maleta, dónde había depositado sus sueños, sus ilusiones y una nueva vida por empezar. Cuando la puerta se abrió, ella se plantó delante de él y con el temor reflejado en sus ojos llorosos, le dijo que se marchaba. Él comenzó con su retahíla de insultos, pero esta vez ella no escuchó.

Salió de la casa y no miró hacia atrás. Solo llevaba un ligero equipaje, pero no necesitaba nada más, su nueva vida había comenzado.


Pilar Fdez. de Torres

LO QUE NO ERES                                   

Cuando te rompes por dentro, crees que todo está acabado, que nada puedes hacer, que la mujer que fuiste se esfumó. Sientes el abismo de la depresión cómo te corroe, cómo las entrañas van quedándose vacías. Ves que el mundo que un día intentaste crear, ha quedado suspendido en la nube más alta, inalcanzable.

Cosas ajenas a tu voluntad pasan por tu piel, por tus ojos, por tu vida y crees que nada puedes hacer. Oyes voces que te dicen que lo que callas, lo que recibes y lo que sientes es así, porque sí. Nada entiendes, nada haces, solo llorar tu destino, convenciéndote que es mejor callar. Sufres en silencio en el rincón de tu alcoba. Esperas una tregua que nunca llega.

Piensas “es lo que único que me queda, que me dejan”. Y lo haces por puro instinto, por supervivencia, porque sabes que lo que pasa por tu mente es inviolable. Ahí eres libre, no eres presa de nada ni de nadie. No eres carne para el depredador.

Los días y las horas pasan y ves que cada minuto de tu vida se evapora, y te das cuenta que tu voluntad quedó anulada aquel día que sentiste en tu piel el “primer beso negro”. Un beso, sobre las cicatrices, que aún arden en tu alma.

Soy tu conciencia y hoy vengo a darte claridad, a llenarte de brisa fresca, a despertarte de tu mal sueño, a darte esa tregua que tanto ansías y que te mereces. Vengo a alentarte que existe un mañana y un destino, sí, ese que sembraste en tu infancia en un mundo de flores y que es hora de cosechar. Vengo a convencerte que sí se puede porque no estás sola. Vengo a grabarte en tu mente, lo que no eres: No eres olvido, no eres marioneta, no eres sombra.

Levanta tus manos y coge las mías, me quedo contigo para ayudarte a lidiar con los demonios de este infierno maldito. Juntas lo conseguiremos.


ARTÍCULO DE OPINIÓN

Gabreila Hefele

Eliminación de la Violencia contra Mujeres                             

El Noviembre 25 es el día de las mujeres maltratadas, también nombrado "el día naranja“, porque este color simboliza "Atención – peligro – alto“. 

Desde 1999 este día es un día internacional de la ONU y hay muchos eventos en todo el mundo, entre el 25 de noviembre y 10 de diciembre, día de los derechos humanos.

En 2004  España se aprobó una ley especial contra la violencia de género,  porque en el tiempo de Franco un hombre no sufría las consecuencias  jurídicas si mataba a su mujer infiel. Hoy el gobierno y muchas organizaciones quieren sensibilizar a la sociedad con la intención de aumentar la protección de las mujeres que sufrían malos tratos por parte de sus parejas y ex-parejas como violencia física, violación, actos sexuales forzados, explotación sexual, acoso, acecho, esclavitud, mutilación genital, matrimonio infantil, matrimonio forzado maltrato psicológico, violación conyugal, femenicidio.

Hasta noviembre de 2022,  los hombres mataron a 78 mujeres, ninguna en Galicia, Asturia ni Cantabria, pero la mayoría en Andalucía. ¿Por sus raíces árabes? Solo unos días atrás un jeque de Quatar explicaba la ley de velo para mujeres como si fuera un “regalo empaquetado”.

Pero en Irán los mujeres ahora se quitan sus velos y arriesgan a torturas y muertes. También muchos hombres del Irán, y mujeres de muchas países, ayudan a las protestas  de las mujeres en el Irán.

Nosotras, las mujeres conformamos un 52 por ciento y somos mayoría en el mundo pero sufrimos del patriarcado y muchas veces, de una educación falsa. 

Yo, por ejemplo, he sido educada por una madre emancipada, y participé en un curso de autodefensa. Este último produce seguridad en una misma y puedo aconsejarlo a todas las mujeres.

                                           


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